martes, 31 de julio de 2012

Cómo solucionar conflictos familiares


Por: Stephan Kaiser
En las relaciones que formamos con los restantes integrantes de nuestra familia, puede suceder que surjan diversos conflictos. Una relación ideal (con un hijo, con nuestra pareja o con cualquier persona), no se define por si existen o no existen conflictos. Una relación ideal se crea cuando se resuelven los conflictos que van apareciendo.
Aquí te presento mi sencillo esquema de cuatro pasos para conversar con cualquier persona sobre el conflicto que exista en la relación – y resolverlo:

1.Observación Neutral
El primer paso para resolver un conflicto es hacer una observación neutral sobre lo que has experimentado en la relación. El secreto aquí es no decirlo con un tono de voz a través del cual se juzga o echa la culpa a la otra persona.

Sencillamente se dice lo que se ha observado en la relación de manera neutral, por ejemplo: “he notado que en las últimas semanas no me has devuelto ninguna llamada”, o “he notado que en el último mes siempre me has dicho que NO a todos los planes que te propongo”.

2.Sentimiento Personal
Una vez que se ha expresado de manera neutral la observación sobre la relación, uno puede decir cómo esa observación lo hace sentir a uno (con un tono de voz honesto – no con un tono de voz de pobre víctima). Por ejemplo: “esto me hace sentir que tal vez ya no me tengas tanta confianza” o “siento que tal vez inconscientemente te he lastimado emocionalmente”.

3.Petición Conversacional
El tercer paso es pedir tener la conversación para resolver el conflicto. NO le pidas a la otra persona que haga determinada acción ni que cumpla tu idea de la solución. Es decir, no le pidas "la cosa". Sólo pídele la conversación sobre "la cosa". Expresa tu petición para tener esa conversación en términos de beneficio para la relación, por ejemplo: “de verdad creo que si simplemente nos sentásemos a hablar sobre esta situación de manera calmada, podríamos mejorar nuestra comunicación y relación”.

4.Conversación Solucional
Una vez que la otra persona ha accedido a conversar contigo, pueden tener la conversación para conseguir la solución al conflicto. En esta conversación se deben cubrir tres cosas: A) Identificar las razones que han llevado al conflicto, B) Pedirse perdón mutuamente, y C) Diseñar e implementar soluciones que resuelvan el conflicto e impidan que vuelva a surgir el mismo conflicto en el futuro.

En mi experiencia de trabajar con diversas familias y colegios, estos cuatro pasos son los más efectivos para solucionar un conflicto familiar de manera efectiva y positiva. Así que, ¡empieza a aplicarlos inmediatamente!